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YOGA Y MENSTRUACIÓN. Preguntas y Respuestas por Geeta S.Iyengar

Este artículo y esta traducción viene por una conversación reciente con una amiga y colega, también profesora de yoga y estudiante de esta filosofía y ciencia,  sobre el hecho de que algunas mujeres practicantes de yoga no vean correcto que se les pida que no realicen ciertas  posturas invertidas o ciertas asanas demandantes para la mujer durante la menstruación, viéndolo incluso como una mirada machista. Aunque por supuesto, depende del nivel de práctica en que se encuentre cada mujer, debemos observar los porqués de esta apreciación en la práctica de la mujer.

 

Me gustaría traducir este artículo donde se entrevista a la reconocida Maestra de Yoga, estilo Iyengar Geeta S. Iyengar, y que apareció en el Iyengar Yoga Institute de New York. 

Podéis encontrar la versión en inglés aquí:

 

 

¿CUALES SON LAS ASANAS Y LOS PRANAYAMAS QUE SE PUEDEN USAR DE MANERA SEGURA DURANTE LA MENSTRUACIÓN?

 

Desde el día uno y hasta que la menstruación termine, deberíamos practicar aquellas asanas que ayuden a la mujer a no crear una obstrucción de su flujo menstrual. Y han de ser Asanas que no dejen a la mujer sin energía o la lleven a un desequilibrio hormonal. 

 

Las extensiones hacia adelante como  Uttanasana, Adho Mukha Svanasana, Prasarita  Padottanasana, Parsvottanasana, preferiblemente con apoyo de la cabeza, ayudan durante la menstruación. 

para aliviar el abdomen una debería hacer primero los movientos de columna concavos antes de llegar a la postura final. 

 

Aquellas mujeres que tienen el cuerpo dolorido esos días,  dolor en la zona lumbar, baja energía o caídas de azucar deberían evitar estas posturas. 

 

Ardha Chandrasana y Uttitha Hasta Padangustasana II ayudan a controlar  el sangrado fuerte, dolor de espalda y dolores abdominales. Las mujeres que sufren de Ciática, problemas de disco tienen que añadir esas dos ásanas a su lista. 

 

Las asanas Supinas, tales como Supta Virasana, Supta Baddhakonasana, Supta Svastikasana, Matseyasana, Supta pagangustasana II, realizadas con soportes como cinturón, bolsters, y mantas, relajan los músculos y los nervios que están bajo un constante estrés e irritación en esos días. Estas asanas ayudan a relajarse, tranquilizar el órgano que está en un constante y vibrante latido, para que se consuma la menor cantidad de energías.

Las mujeres que sufren de falta de aire, pesadez en los pechos, retención de líquidos, fuerte sangrado, dolores abdominales, irritación mental o impulsividad. encuentran en estas asanas la manera de reducir y deshacerse de esos problemas.

 

Las sencillas extensiones hacia adelante tales como : Adho Mukha Virasana, Adho Mukha Svastikasana, janu Sirsasana, Triang Mukhaikapada en Paschimottatanasana, Ardha Baddha Padma in paschimottansana, Marichyasana, Parsva Upavisthakonasana, Adho Mukha Upavisthakonasana realizada de manera relajante, controla el sangrado excesivo, suaviza el abdomen y hace que las celulas cerebrales descansen. Ayuda a las mujeres que sufren dolor de cabeza, dolor de espalda , sangrado fuerte, dolores abdominales y fatiga.

 

Las ásanas sentadas tales como SVastikasana, Virasana, Padmasana, Baddhakosana, Upavistakonasana, Gomukasana, Mulabandhasana etc.., ayudan a quitar tensión y estrés. Y es el momento de tratar con las rodillas, los gemelos, las inglés, tobillos, dedos de los pies para lubricar, extender y flexionar, para que las articulaciones se suelten y así la inflamación y el dolor se puede erradicar. 

Cuando las piernas se aligeran con estas asanas el cerebro también se calma. 

 

Durante la menstruación, tenemos mujeres que sufren de artritis, dolores reumatoides, inflamación de la articulación con estas ásanas se nos da el tiempo de trabajar con esas zonas y poco a poco y gradualmente liberar y relajar las articulaciones sin ser agresivos.  Aquellas mujeres que no pueden hacer Virasana, Padmasana, pueden colocar aquí una energía no agresiva para trabajar en sus rodillas , sin prisa en terminar su práctica dedicándole tiempo. 

 

Para tener un descanso orgánico y nervioso bueno deberíamos de realizar Viparita Dandasana y Setubandha Sarvangasana, que ayuda a energizar y estimular el cerebro, pecho, pulmones, corazón y mantener un buen balance del sistema hormonal y glandular.

Podemos hacer Savasana, Ujjayi y Viloma Pranayama en Savasana. 

Si la menstruación es normal sin dolores, dolor de cabeza, irritación, ansiedad, sofocos, depresión se pueden realizar estas dos últimas respiraciones en postura sentada. 

 

Entre todas estas asanas, para mantener la salud durante la menstruación uno debería como rutina practicar asanas supinas, extensiones hacia adelante y Viparita Dandasana y Setubandha Sarvangasana y pranayama en Savasana, esto puede llevar de hora y media a dos horas. 

 

 

¿QUE ASANAS Y PRANAYAMAS DEBERIAN SER EVITADOS?

 

Deberíamos evitar las invertidas  tales como Adho Mukha Vriksasana, las asans de equilibrio sobre los brazos como Bakasana, las extensiones hacia atrás tales como Urdhva Dhanurasana, Kapotasana y las asanas que anudan y torsionan nuestro cuerpo como Yoganidrasana Ek pada Sirsasana y las contracciones abdominales como Navasana Y Jathara Parivatasana. 

 

Deberiamos eviar pranayama en asana sentada y si se hace no debería ser por demasiado tiempo, no mas de 15 minutos.  Evitar Antara Bhaya Kumbhakas, Uddiyana y Mula Bandhas, Bhastrika y Kapalabhati y Mahamudra. 

 

¿POR QUÉ NO DEBERIAMOS HACER INVERTIDAS DURANTE LA MENSTRUACIÓN?

 

Durante la menstruación si uno hace invertidas el flujo de sangre será arrestado. Aquellas mujeres que lo intenten llevadas por el entusiasmo o insensibilidad notarán como este flujo se para de forma abrupta. Y esto no es nada bueno para la salud, puede llevar a la aparición de quistes, fibromas uterinos, endometriosis, cancer, dañando el sistema. De acuerdo con el Ayurveda, aquello que necesita ser expulsado fuera ha de ser expulsado y no retenido. No puedes dejar dentro tu orina, tus heces, tu flema, tu moco, ya que son substancias que han de ser expulsadas, son llamadas el desperdicio que ha de ser expulsado y si cualquiera de ellos es retenido invitará a la enfermedad. 

 

Durante la menstruación deberíamos rebajar nuestra práctica física, incluso caminar, bailar o el trabajo duro de la casa. El cuerpo nos pide descanso y relax y una necesita dárselo. Las invertidas tienen sus propias características. Esta categoría de asanas retienen el flujo menstrual y cuando se hacen durante el embarazo sujetan al feto de manera segura y saludable. 

 

Para las mujeres que tienen abortos frecuentes estas asanas han probado ser beneficiosas. Aquellas mujeres a las que se les prolonga el periodo mas de 15 días, se las permite realizar las invertidas a partir del día 12, aunque si tienen un flujo continuo de nuevo la invertida retendrá el flujo. Lo ideal es saber la causa de ese prolongado sangrado y tratar la enfermedad con otro tipo de asanas durante los días de no menstruación. Y así todo el tema del flujo ha de ser siempre comprobado de manera personalizada. Si una mujer tiene menstruación durante la ovulación, las invertidas por ejemplo, se administran como medicina. 

 

Después del ciclo menstrual, se puede volver a la práctica de invertidas , ya que en otros aspectos son grandes sanadoras en lo que al sistema reproductivo respecta. Pues traen un equilibrio al sistema hormonal. 

 

Teniendo en cuenta lo dicho, y sabiendo ya los efectos de las invertidas sobre nuestro ciclo menstrual, no hay duda de que es mejor obviarlas de la práctica durante este periodo.  Y si así todo, por obstinación o rigidez, si una mujer se fuerza así misma a hacerlas puede que lo pague mas tarde, quizás no inmediatamente. El flujo ha de terminar completamente antes de que comenzamos nuestra práctica de invertidas de nuevo. Y la cuestión no está en el 3º o 4º día, como he dicho cuando el flujo ha terminado completamente. Y en cuanto para, no vayas rapidamente a practicar todas las asanas que hemos comentado no son recomendadas, recuerda que es como si hubieras parido un bebe no nacido ya que la menstruación también se la conoce como el funeral del bebe no nacido.

 

Geeta S. Iyengar

Pune.Febrero 2003